Futuro sostenible: ¿cómo es el modelo de negocio de una empresa sostenible?
¿Sabías que más dos tercios de las PYMES mexicanas implementan medidas de sostenibilidad ambiental? ¡Así es! La mayoría de ellas lleva a cabo estas medidas con sus propios recursos.
Esto quiere decir que existe un alto nivel de conciencia ambiental dentro del ámbito corporativo y que cada día las empresas se enfocan más en ofrecer productos y servicios de manera sostenible.
En ese sentido, en este artículo te explicaremos:
- ¿Qué es un modelo de empresa sostenible?
- ¿Por qué es importante?
- ¿Cuáles son las ventajas de migrar hacia un modelo de negocios sostenible?
- ¿Cómo integrar la sostenibilidad dentro de tu empresa?
¡Comencemos!
¿Qué es una empresa sostenible?
Las empresas sostenibles son aquellas que incluyen en su estrategia el uso eficiente de los recursos naturales como un medio para alcanzar la productividad, de modo que les brinde la posibilidad de competir con otras compañías.
Cabe destacar que la base de una estrategia sostenible es asegurar las necesidades actuales sin poner en riesgo las del futuro, actuando en 3 dimensiones:
- Aumento del crecimiento económico;
- Aumento del bienestar social;
- Reducción del consumo de recursos y la contaminación.
Otro aspecto importante de las empresas sostenibles es que contribuyen con la generación de empleos de buena calidad, teniendo en cuenta la protección de sus derechos.
No todas las marcas más reconocidas son sostenibles, pero existe una alta tendencia a que las empresas integren en sus estrategias comerciales la reducción de residuos, el uso eficiente de la energía y del consumo de agua.
De acuerdo con el estudio "The Truth About Global Brands 2: Powered by the Streets" de McCann Worldgroup en España:
"El 81% de los ciudadanos cree que las marcas globales pueden desempeñar un rol importante para el bien común"
Es importante destacar que la sostenibilidad no es solo un asunto de responsabilidad social corporativa, por lo que va más allá de destinar un porcentaje de las ganancias para labores sociales.
En la actualidad, las firmas procuran que sus actividades empresariales tengan un impacto positivo en la comunidad donde se encuentran ubicadas.
Modelo de negocio sostenible
Estos nuevos modelos se basan en el beneficio como resultado de las actividades comerciales, no como su propósito.
Un modelo de negocio sostenible se fundamenta en:
- Una propuesta de valor con un producto sostenible y de bajo impacto social y ambiental.
- Relación con los clientes mediante un marketing responsable (creíble, consistente y comprometido) y una formación y concientización en materia de sostenibilidad.
- Socios clave: garantizando un suministro responsable, mejorando las relaciones entre empresa y trabajador; y dando respuesta a las expectativas de los stakeholders, fomentando la innovación.
- Actividades clave: logrando una comunicación eficaz mediante el diálogo, la transparencia y la rendición de cuentas; mejorando las prácticas de contratación y compras; escuchando a los clientes, proveedores y trabajadores; así como realizando una evaluación social y ambiental de los proveedores.
4 beneficios de la sostenibilidad empresarial
La sostenibilidad empresarial no solo beneficia a la sociedad y al medioambiente, sino también a la misma empresa. Aquí te dejamos las ventajas más destacadas:
1. Disminuye los costos de tu empresa
Si bien es cierto que dar el paso hacia la sostenibilidad empresarial puede resultar costoso al principio, con el tiempo te ayuda a ahorrar mucho dinero. Algunos ejemplos de cómo implementar la sostenibilidad en las empresas son:
- reutilizar materiales existentes o reciclar otros que te sirvan como materia prima para fabricar nuevos productos;
- hacer la transición a equipos de bajo consumo energético, y
- aprovechar los incentivos de gobiernos que otorgan reembolsos, facilidad en materia legal, créditos fiscales y ahorros a las empresas por ser ecológicas.
En última instancia, mientras más sostenible sea tu empresa, menos recursos gastará en energía y materias primas.
2. Mejora la imagen de tu marca
La imagen de la marca depende en gran medida de la coherencia del mensaje que transmite y sus acciones. Las personas perciben la sostenibilidad empresarial como algo bueno.
Por esta razón, convertirte en una empresa sostenible le muestra a tu público objetivo que no solo te interesa vender, sino que quieres contribuir con el medio ambiente.
Además, incrementar la eficiencia de tu empresa mientras trabajas por un mejor planeta será una gran razón para que tu equipo de trabajo se sienta a gusto.
Por si fuera poco, tus clientes sentirán más confianza en ti y podrás servir de inspiración a otras compañías de tu industria, que se fijarán en tus acciones para emprender hacia modelos sostenibles.
3. Otorga una ventaja competitiva
Considerar el impacto ambiental en tu estrategia comercial y comunicarle todo lo que haces a tu público de forma transparente te otorga una ventaja frente a otras empresas de tu sector. Una firma sostenible atrae nuevos clientes, nuevos talentos y nuevos inversionistas porque impacta positivamente en la sociedad.
4. Conectas con un público más consciente
Hoy por hoy, en el mundo empresarial existe una tendencia cada vez más acentuada: los consumidores desean conocer cómo se elaboran los productos que ofrecen las marcas y cuál es el impacto ambiental que tienen. Si brindas esta información a tu audiencia y saben que tus procesos son amigables con el medio ambiente, lo valorarán de forma muy positiva.
Un estudio llevado a cabo por la agencia Havas Worldwide llamado Superbrands 2016: los consumidores y el futuro de los modelos empresariales detalló que la tendencia del consumo ecológico y responsable va en aumento.
Algunas conclusiones importantes de dicho informe fueron:
- 58% de los encuestados manifestaron interesarse en conocer si los productos que consumen provocan algún impacto ambiental;
- 53% de esas personas han afirmado que dejaron de adquirir productos cuyo impacto ambiental es negativo;
- 7 de cada 10 personas implicadas en dicho estudio afirmaron que les gustaría ver implicadas a sus marcas favoritas en causas sociales.
5 pasos para implementar un modelo de negocios sostenible
Para avanzar hacia un modelo sostenible, las empresas tienen que contemplar algunas actividades claves:
1. Definir la materialidad
Un análisis de materialidad consiste en identificar los aspectos más importantes de la empresa y jerarquizarlos.
Si bien es cierto que existe mucha información ambiental y de sostenibilidad que se divulga públicamente, es difícil identificar cuáles son los datos más útiles al tomar decisiones.
Por esta razón, los análisis de materialidad son una gran herramienta para enfocar la estrategia y los objetivos comerciales hacia los temas de mayor impacto.
2. Identificar problemas claves y controladores
Si deseas conocer cuál es tu ruta, tienes que entender tu punto de partida. ¿Estás comenzando, has implementado algún cambio importante o deseas evaluar tus esfuerzos actuales de sostenibilidad?
Esta evaluación te brinda la posibilidad de comparar las prácticas de tu empresa con lo que deseas alcanzar, medir indicadores de gestión y establecer objetivos. Además, una evaluación eficiente te permite llevar a cabo una ruta que incluya proyectos a corto, mediano y largo plazo.
3. Elaborar una estrategia de sostenibilidad
Una estrategia de sostenibilidad debe estar alineada a la planificación estratégica de la compañía (misión, visión y objetivos). Aunado a ello, tiene que considerar las líneas de tiempo y los indicadores personalizados para cumplir con los objetivos financieros, de sostenibilidad y operacionales.
La clave son los temas y las partes interesadas que se definieron en el análisis de materialidad y los problemas detectados. La solución de dichos inconvenientes debe estar representada en el modelo de negocio que la empresa va a implementar en el futuro.
4. Establecer metas, objetivos y el respectivo plan de acción
Es necesario establecer metas, su temporalidad, sus indicadores y reportes de avances para que puedas hacer de tu empresa un lugar sostenible.
Si tu compañía no ostenta de objetivos sostenibles definidos, se desperdicia el talento humano y los recursos.
Para ello te recomendamos la metodología SMART que significa específico, medible, alcanzable, relevante y con un límite de tiempo.
Por ejemplo, un objetivo sostenible para una empresa puede ser: implementar un software de firma electrónica que les permita reducir el desperdicio de papel y el manejo de documentos físicos. Teniendo como meta el ahorro de hasta 750 mil pesos en impresiones y la eliminación de hasta 300 mil hojas de papel en el primer año.
5. Monitorear los resultados
Evaluar los resultados de los indicadores que estableciste para tu estrategia de sostenibilidad te permitirá conocer el desempeño del proceso y corregir su rumbo (en caso de que se requiera). También será la base para emprender nuevos retos.
Si continuamos con el ejemplo anterior, una forma de medir el desempeño de dicho objetivo es elaborar un indicador de gestión. ¿Se logró recolectar la cantidad mínima de envases en el primer año? En caso de que no se haya logrado, podrás repensar tu estrategia y corregir los errores.
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