¿Qué es una nube híbrida y cuándo usarla?

Un hombre mira a traves de la ventana de su oficina

La nube híbrida es cada vez más común en el mundo del cloud computing: la computación en la nube se ha apoderado del mercado de los servicios, tanto para usuarios como para empresas, desarrollando herramientas para casi cualquiera de las tareas diarias, como escuchar música, almacenar datos, transmitir audio y video en tiempo real, acceder a servicios y firmar acuerdos y contratos.

Gracias a sus características de rapidez y seguridad, cada vez más empresas optan por hacer uso de servicios en la nube, pues representan una gran ventaja frente al almacenamiento tradicional en medios físicos.

¿Sabes qué es la nube híbrida y por qué utilizarla? ¡Descúbrelo a continuación!

¿Qué es la nube híbrida?

Teniendo claro que la computación en la nube es la tecnología que hace posible acceder y utilizar miles de servicios sin necesidad de descargar o almacenar nada en las computadoras o dispositivos móviles, vamos a profundizar en un concepto un poco más avanzado: la nube híbrida. 

Esencialmente, la nube híbrida es la combinación de un almacenamiento privado con un servicio de nube pública, concediendo a las empresas mayor flexibilidad entre una y otra solución de nube según las necesidades y posibilidades económicas de cada negocio.

Para comprender mejor la función de la nube híbrida, veamos cómo funciona a grandes rasgos la computación en la nube. 

Tipos de nube

Los servidores remotos son los que permiten conectar diferentes dispositivos a los recursos y servicios que serán usados.

De esta manera, el servidor almacena los datos y programas que serán accesibles para los usuarios desde cualquier lugar del mundo siempre que exista una conexión a internet. 

Así, existen tres tipos de computación en la nube:

1. Nube pública

La nube pública es el tipo de implementación más común y se trata de servidores y servicios abiertos para que cualquier usuario o empresa los utilice, ya sea de manera gratuita o contratando un plan. 

En este tipo de nube, el usuario es responsable por el contenido enviado al servidor.

El software y el almacenamiento pertenecen al proveedor de servicios en la nube, así como también el mantenimiento y aseguramiento de los datos: en la nube pública se comparte el hardware, almacenamiento y red con otras personas.

Algunos servicios frecuentes que usan la nube pública son los entornos de desarrollo, correos electrónicos y almacenamiento como Google Drive o Dropbox. 

2. Nube privada

La nube privada está compuesta por servicios e implementaciones de software de uso exclusivo para una empresa en particular y se puede alojar en el centro de datos de esta o bien mediante un proveedor de almacenamiento externo. 

Una nube privada permite que una empresa personalice los servicios de acuerdo con sus necesidades, razón por la cual es común que sea empleada por organismos de gobierno, bancos y grandes empresas que requieran tener más control sobre su área de TI. 

3. Nube híbrida

La nube híbrida combina la nube privada con la nube pública y permite que los datos fluyan en los dos entornos: muchas empresas prefieren la nube híbrida para poder cumplir con exigencias normativas y de gobierno de datos. 

En suma, la nube híbrida incorpora la gestión y portabilidad de las cargas de trabajo en dos o más entornos.

Características de la nube híbrida 

Algunas de las características de la nube híbrida son:

  • Permite conectar varias computadoras por medio de una red.
  • Fusiona los recursos de TI.
  • Promueve la escalabilidad y adaptación a nuevos recursos.
  • Desplaza cargas de trabajos entre los entornos.
  • Incluye una herramienta de gestión integral.
  • Soporta procesos de automatización.

Ventajas de cada tipo de nube

No existe un modelo que se ajuste perfectamente a todos los usuarios: si bien la elección de uno u otro tipo de nube depende de la etapa de transformación digital de cada organización, podemos hablar de algunas características generales que destacan en cada una de ellas: 

Ventajas de la nube pública 

  1. Menor costo, pues solo se paga por el servicio utilizado.
  2. El mantenimiento corre por cuenta del proveedor. 
  3. Escalabilidad, ya que es posible encontrar soluciones de acuerdo a las necesidades de cada empresa. 
  4. Confiabilidad al estar soportada en una gran cantidad de servidores.

Ventajas de la nube privada

  1. Flexibilidad, ya que se adapta a las necesidades específicas de la empresa. 
  2. Más control y privacidad, pues no se comparten recursos con nadie. 
  3. Mayor escalabilidad en comparación con entornos locales. 

Ventajas de la nube híbrida

  1. Existencia de un nivel de control específico para aquellas cargas de trabajo confidenciales. 
  2. Flexibilidad, ya que puede hacerse uso de los recursos de la nube pública también. 
  3. Rentabilidad, pues solo se paga por los recursos adicionales cuando es necesario. 
  4. Facilidad de uso al momento de trasladar las cargas de trabajo de una nube a otra. 

Funcionamiento de la nube híbrida

Lo que define a una nube híbrida es su capacidad de interconectar los servicios de la nube privada y la nube pública: sin esta característica de interconexión, pueden existir nubes privadas y públicas, pero si operan de manera independiente no se considera como híbrida. 

Al operar mediante varios puntos de contacto y varios softwares, la nube híbrida logra controlar y gestionar el desplazamiento de las cargas de trabajo, los recursos y la integración entre plataformas. 

Beneficios de la nube híbrida

Dado que las empresas —tanto grandes como pequeñas— no utilizan siempre el mismo nivel de computación, vale la pena apostar por una nube híbrida que permita adaptarse a niveles altos o bajos de transacciones de datos dependiendo de la época del año o el crecimiento organizacional. 

De esta manera, una organización puede ahorrar costos innecesarios al hacer uso de la nube privada solo cuando haga falta. 

También, la nube híbrida ocupa menos espacio en las instalaciones en comparación con un modelo privado.

En resumen, una nube híbrida permite a las empresas tener más opciones para elegir las que mejor se adapten a las necesidades del momento: las ventajas de un plan de nube híbrida provienen de la facultad de ofrecer a los dirigentes de TI un control más amplio sobre sus datos. 

¿Cuándo utilizar una nube híbrida?

Esta decisión debe tomarse con base en las características, necesidades y posibilidades de cada empresa en particular, pues no hay una fórmula que diga cuándo utilizar esta y otra solución.

Eso sí, los siguientes aspectos pueden orientar a tomar una decisión adecuada: 

  • Definir para qué se va a usar la nube específicamente.
  • Revisar cuáles servicios de la nube pública conviene mantener en términos de rentabilidad.
  • Establecer la ruta de integración de las cargas de trabajo actuales con la nube híbrida.
  • Examinar si la tecnología actual de la empresa es compatible con la nube híbrida y si no, ¿cuánto costaría dicha adaptación?
  • Considerar las competencias que se deben entrenar para la utilización eficiente de la nube híbrida.

¡Eso es todo! Ahora, ya conoces qué es la nube híbrida, sus beneficios y cuándo utilizarla.

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